Como cada mes, os dejamos la crítica más comunista de la galaxia, este mes toca Birdman o (La Inesperada Virtud de la Ignorancia)
Birdman o (La Inesperada Virtud de la Ignorancia).
Dirigida Alejandro G. Iñárritu por y con guión de Alejandro G. Iñárritu, Nicolas Giacobone, Alexander Dinelaris y Alexander Bo. La interpretación corre a cargo de Michael Keaton (Batman) y por Eric Bana (Hulk) y también por las actrices Emma Stone y Naomi Watts.
Sobre apartado técnico destacar que desde 1966 con La soga, no se había realizado una película completa en plano-secuencia completo. En aquella ocasión Hitchcoct realizó una sencillo plano-secuencia en una sola casa que a lo sumo movía de una habitación a otra, en Birdman la cosa va más allá con un trabajo previo de storyboard tremendo, ya que hay cambios muy variados en tanto interior (escaleras, diferentes habitaciones, escenario teatro, etc...) como interior-exterior, y de seguimiento de personajes (en La soga más que seguimiento lo que hace Hitchcock es dejar una cámara fija con plano general).
En historia, el protagonista busca realizar una obra de teatro, siendo que él es un actor del mundo hollywoodiense encasillado como héroe de acción (superhéroe concretamente y despilfarro de efectos especiales), el motivo es interpretar la obra que lo llevó a ser actor en su juventud, de Raymond Carver “De qué hablamos cuando hablamos de amor”. Historias varias se suceden que hacen difícil que se puedan llevar bien los ensayos para los preestrenos y estreno de la obra. El resto lo veis.
Sobre la intencionalidad y lo que da chicha de verdad a la película, todo, en mi opinión sobre el mensaje de la película queda retratado en la escena en la cual el personaje de Keaton habla con Tabitha Dickinson (Lindsay Duncan), crítica especializada, quien le asegura que odia a las estrellas de Hollywood que «pretenden» ser actores y le promete «matar» su obra con una crítica negativa. Aparentemente este personaje encarna en la película al propio director y su concepción del cine y teatro en general y del cine de superhéroes en particular, pero también en boca de Keaton hace un contraargumento, defiendo el cine comercial y la figura del “actor” que quiere ser Actor.
Tampoco entraré más en esto dejando que el espectador saque sus conclusiones, las mías, en tanto que calificación se refiere, me han llevado a valorarla con un 9.
Y como siempre decimos, esta crítica es solo bajo nuestro juicio
(bueno, realmente bajo el juicio de un Jawa comunista). Sabemos y
respetamos la opinión de todo el mundo.
Si tienes otra opinión distinta o crees que merece otra puntuación, puedes dejarnos tu punto de vista en los comentarios.
Qué ganas de verla me han entrado al leerte!!
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